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EXPECTATIVA CERO

¿Arquitectura para arquitectos, o para la gente?

¿Arquitectura para arquitectos, o para la gente?


La arquitectura siempre reveló dos discursos bien dispares respecto del gusto del arquitecto, uno tiene que ver con la idea de intelectualizar la arquitectura y otro más común, de demanda más frecuente, que intenta satisfacer el requerimiento ciudadano. Hoy estas dos ideas que parecían antagónicas, demuestran ponerse de acuerdo para conformar, una sola arquitectura.


Hace algunos años, el arquitecto y periodista Carlos Dibar, manifestaba, con conocimiento de causa, que si fuera a un escrutinio el gusto de los porteños por la arquitectura de Buenos Aires, grande sería la sorpresa en la elección. Por ejemplo si se tomaran dos modelos arquitectónicos bien representativos de la ciudad, como pueden ser el Park Hayatt Hotel, ubicado en Cerrito y Posadas, obra del arquitecto Santiago Sánchez Elía y en contraposición a este, eligiéramos al edificio de la Biblioteca Nacional, del renombrado Clorindo Testa, -ambos edificios diferenciados principalmente por su concepción estilística- los resultados sellarían las claras diferencias existentes, entre el gusto de los usuarios y el de los arquitectos.
Sin lugar a dudas la propuesta de Dibar certificaba que las tendencias en el desenlace serían la siguientes, por un lado, los usuarios en su mayoría adoptarían aquel modelo de imagen clásica, que presenta el Hotel Hayatt (o sea una arquitectura más factible de encantar al común de la gente, que llamaría, una arquitectura hollywoodense), mientras que en otro plano, un gran número de arquitectos, se volcarían por el estilo brutalista de Testa, obra que podríamos catalogar dentro de la arquitectura intelectualizada.
Esta breve introducción sirve como puntapié inicial para poder desarrollar y llegar a entender, de que se trata aquella larga discusión, sobre la existencia de una arquitectura para el gusto de los arquitectos -que generalmente es la que se genera en los ámbitos universitarios- y otra distinta -realizada para satisfacer al usuario-, que no es ni más ni menos, que aquella que generalmente se manifiesta a diario en la ciudad.
Es imprescindible poner de manifiesto, que a pesar de que hoy sigamos discutiendo esa dualidad, entre unos y otros, existen algunos nuevos ejemplos edilicios, que permiten entrever una luz en el camino sobre este tema.
Pero antes de adentrarnos en estos ejemplos barriales, será interesante ir viendo, que es lo que fue sucediendo con esta clara controversia a través del tiempo; pensemos que, desde la primera mitad del siglo XIX los ejemplos academicistas italianos, luego seguidos por los modelos académicos franceses, eclécticos, pintoresquista y otras variantes más, (que podríamos definir como un gran baile de máscaras, y efectivamente eran solo máscaras las que ocultaban el contenido del inflexible espacio arquitectónico) no encontraron diferencias en lo esencial de la arquitectura (que no es otra cosa que el espacio arquitetcónico) solo proporcionaban una mayor monotonía.
Luego, en las primeras décadas del siglo XX, llegaron las tendencias vanguardistas -art nouveau , art decó- que no dejaba de ser nuevamente un cambio de atuendo, sin que esto implique una transformación profunda del tan mentado espacio arquitectónico, aunque queda claro, que no se puede dejar de reconocer a estas vanguardias, como las primeras intenciones de cambio, peor que solo quedaron en intenciones.
Hasta aquí podríamos reafirmar, que entre arquitectos y usuarios, no había grandes discusiones, solo era cuestión de saber elegir el ropaje más adecuado para cada obra; el problema realmente se suscita, con la llegada de las nuevas ideas (turbulentas), que traían aquello que participaron de lo que se dio en llamar Movimiento Moderno; arquitectos como Le Corbusier, Adolf Loos, Mies Van der Rohe, Frank Lloyd Wright y tantos otros se habían involucrado, en una de las transformaciones más profundas, que llegó a tener a lo largo del tiempo la arquitectura .
La concepción de nuevas ideas del espacio, que planteaba una mirada diferente del tema edilicio, también venía a revolucionar las cabezas de los arquitectos argentinos, aunque no lograba ser digerida por los usuarios. Solo estas ideas modernas -aquella de paredes libres de toda decoración y de un nuevo pensamiento espacial- comenzaría a ser aceptada por la elite porteña, recién cuando Victoria Ocampo intentó usarla como un esnobismo, aunque de todas formas no logro inquietar al común de la gente, quienes seguían cada vez más aferrados a tipologías arquitectónica arraigadas en la ciudad como fueron, las casa chorizo, el chalet ingles y alguna que otra variante estilística de las que abundaban en los barrios. Todo esto viene a significar un aumento en la brecha, no solo entre usuarios y profesionales, sino también entre las diferentes clases sociales, que competían por estar más cerca de la moda.
Hoy, con el transcurso del tiempo las disímiles ideas arquitectónicas que van al encuentro de la gente, comienzan a lograr un acercamiento mayor entre unos y otros, casi olvidando esas viejas controversias.
Un claro ejemplo de esto lo podemos ver en toda la ciudad, donde la nueva arquitectura impacta a los ojos de la gente, que a su vez muestran una mayor predisposición por entender las proposiciones de los arquitectos. De la misma forma también comienza a extenderse en los barrios con obras tan significativas como, por ejemplo el edifico de departamentos de la calle Cramer 1642, construido entre 1998 y 1999, por el estudio de arquitectura formado por Esteban Caram y Gustavo Robinsohn, quienes fueron acreedores de un significativo premio, por parte de la British Academy, denominado World Architecture Award, distinción que es entregada según la categoría y la región. Dicho sea de paso, como lamentablemente suele suceder en nuestro país, recién después de ser premiada la obra en el exterior, en el ámbito de la arquitectura nacional, empezaron “como a darse cuenta” de la importancia que tiene, tan interesante e innovadora obra.
El edificio conserva la singularidad de romper con los esquemas convencionales, del espacio arquitectónico; la materialización de la obra se llevó a cabo con elementos de bajo mantenimiento, sin dejar de lado su buena calidad, aunque sin duda alguna, la resolución empleada, en las expansiones semi cubiertas -casi como un ambiente más- es el mayor acierto en su diseño, una especie de “frutilla del postre”. Este es sin duda el atractivo, que los potenciales usuarios, han llegado a valorar más y a tener en cuenta como motivación de compra.
Otro ejemplo, que podemos incluir como paradigmas arquitectónicos, lo podemos observar en el barrio de Coghlan, específicamente en donde alguna vez funcionó la famosa fábrica Nestlé. Hoy en este predio, se está concluyendo con un importante complejo habitacional de gran calidad; aquí la propuesta toma resabios de prestigiosas obras de los años treinta como puede ser el conjunto Los Andes en el barrio de Chacarita, aunque en este caso, no se trata de viviendas de carácter social, sino más bien, de viviendas de gran confort, aunque de todas formas lo que se rescata es la similitud, en la concepción urbana del conjunto.
La aceptación por parte del común de la gente de estas nuevas propuestas arquitectónicas muestra un acercamiento entre los profesionales y los usuarios
Como corolario, agregaré aquellas palabras del maestro Oscar Niemeyer (Junto con Lucio Costa, fueron los creadores de la ciudad de Brasilia), que pueden hacernos reflexionar sobre el camino a seguir para poder amalgamar ideas:
>.



Arq: JorgeLuchetti.



15 comentarios

Woody Allen -

En realidad, prefiero la ciencia a la religión. Si me dan a escoger entre Dios y el aire acondicionado, me quedo con el aire.

Anónimo -

Sujeta, nuevamente agradezco sus palabras. Piense también que el interés por lo epistémico nos aleje de la realidad y es probable que sea lo que en definitiva uno anhela. Hasta pronto.

La pardi -

Ustedes quienes son,por que saben tanto? yo sólo busco distraerme y con esto que escriben no entiendo nada,disculpen mi ignorancia.

Sujeta -

Sr.Anónimo: hermosa profesión la suya, aunque poco frecuente. Precisamente, estoy leyendo ahora "La poética del espacio", de Bachelard, que si bien se caracteriza por su particular enfoque lírico-epistemológico, descubre los rincones ocultos de lo habitable con la meticulosidad de un psicoanalista. Claro que no es lo mismo la psicología que el psicioanálisis, como sabrá mejor que yo, del mismo modo que describir e interpretar son operaciones que provienen de distintas motivaciones y se encuadran en sus propios paradigmas. Un placer haber charlado con Ud., Anónimo Psicólogo del Espacio Arquitectónico. Mi profesión es más prosaica, pero el interés en lo cognoscible nos acerca. Hasta pronto.

Anónimo -

Sujeta, agradezco sus palabras, desconozco que gente frecuenta Ud, pero lamento decepcionarla, no soy un hombre preparado, es evidente que no me conoce, solo soy un lobo estepario, que intenta saber cuando uno es hombre y cuando lobo.
Con respecto al arquitecto Livingston, creo que no inventó nada nuevo, solo es un hábil marquetinero, que utiliza títulos como el de “cirugía de casas o consultorio de arquitectura” algo inteligente que realmente vende.
En realidad la misma formación universitaria siempre nos ha inducido a intentar interpretar al cliente, no es un invento de Livingston, pero ojo, nos podemos equivocar.
Hace unos meses se estrenó la torre Grand Bourg, en donde sus arquitectos usaron el estilo neoclásico en pleno siglo XXI, diríamos algo extemporáneo, pero ellos aducen haber interpretado el gusto de sus clientes, ya que los departamentos fueron vendidos en muy poco tiempo. El marketing y la propaganda, llevó a los futuros clientes a comprar algún departamento en una torre country, de estilo clasicista, algo tan anacrónico como volver a usar en estos tiempos polainas y levita,
Con respecto a los arquitectos de la posguerra, creo que ya ellos habían asimilado, las raíces de las ideas vanguardistas de los arquitectos de la Bauhaus o anteriores como los protorracionalistas por ejemplo, Loos, Behrens, Hoffman y otros tantos, que en los albores del siglo XX, habían transformado radicalmente el pensamiento arquitectónico.
De todas formas esto es mucho más extenso de explicar en unas pocas líneas, al igual que le tema del ecodiseño, que si bien desconozco en la profundidad el tema, le comento que me recuerda a lo sucedido con las viviendas con energía solar.
En el año 80 en la Plata se hizo un prototipo de casa con paneles solares, nunca más se supo de ella y muy poco ha crecido el mercado de esta arquitectura ecológica. Quizás el tema marquetinero no dio resultado o seguramente el interés de otras empresas lo hizo fracasar, por lo menos en nuestro país.
Ah, vale aclararle que no soy arquitecto soy Psicólogo del espacio arquitectónico.

Sujeta -

Me olvidaba: apreciaría conocer su opinión sobre la práctica de la "cirugía de casas" que está haciendo actualmente el arquitecto Livingston. Yo lo prefería cuando promovía el diseño comunitario en Cuba; no sé Ud. ¿Y qué me cuenta de la hipocresía del llamado "ecodiseño"? ¿No le parece una burda estrategia de marketing del establishment arquitectónico? Se nota que esos tipos nunca leyeron el bellísimo discurso de Heidegger "Construir, habitar, pensar", que tan oportunamente dirigiera a los arquitectos alemanes durante la reconstrucción de la devastada Alemania de posguerra. Ah...me emocioné al recordarlo. Un cariño, arqui.

Sujeta -

Me encantó lo suyo, arquitecto. Se nota que Ud. sí es un hombre preparado, no como los otros que se ven por aquí. Y no sé quién será esa Pardi, pero, si lo conoce, la envidio.

tin-tin -

Che mnadra ya descubriste mi identidad pero te costó saber quien era xx
bueno acá con la pardi esta todo bien ella está laburnado y yo descansando un poquito. bueno así es el amor - besos - cada día me calienta más mi pardi

xx -

che man, la pardi es mi mujer

ojeto -

A ver, a ver, parate un momento. Quien es La pardi??
Te dirigís a mí mamita? Hacelo con precaución. La última chica que me dijo esas cosas están todavía tratando de sacarle lo que le metí. Vos fijate amor..

la pardi -

me copa lo que escribís bebe.

ojeto -

Da gusto visitar esta página, llena de cultura y de degenerados..

MONICA PLANT -

CLORO ES UN GENIO

LEMOS -

CLORINDO ES NAPOLITANO POR LO TANTO DEB SER UN CAPO MAFIA COCOCHO ES MEJOR

pablo milanes -

yo creo que es mas lindo la biblioteca nacional,clorindo testa es un capo.es el godard de la arquitectura.